¿REALIDAD, SUEÑO? de Leonor y Jesús

En el crepúsculo de esta tarde sinuosa
ensimismada contemplo nuestro mar
tarde templada en el mar Cantábrico
clima suave, sin extremos qué desafiar.

Apacible hamaqueo de mi cama improvisada
miro desafíante a la noche cercana
sin mover un solo músculo,
en extremis de relax.

A la vista de la Luna
y de la estrella Polar
los demás luceros se dejan admirar
bajo la bóveda celeste, embrujo total.

Siseos del mar con la brisa
abanico de olas rumor de castañuelas,
en el bosque cercano un chillido
resuena quejumbroso, agónico
indica la muerte de un ratoncillo
por el búho que canta triunfal
la despensa tiene que llenar
para su prole alimentar.

Entrecerrados los ojos tiembla mi interior
al pensamiento sublime del recuerdo de vos
torrente de ilusiones, de mi corazón amante,
lleva mi sangre ardiente el eco de tu voz.

Sigue imperturbable el hamaqueo silencioso
misterioso balanceo despierta mis sentidos
¡ aquí estas tú ! con tu sonrisa de siempre,
acariciando mi pelo, mi frente.........

Al sellar mi boca con tus besos
las entrañas se revuelven excitantes
y en mi barca acontecen deseos delirantes
apagados con la antorcha de tu cuerpo
y los ríos fascinantes.

Todo fue un sueño voluptuoso, amor
provocado por la nostalgia de tí
y el ambiente embriagador;

fue tal desilusión........
por mis mejillas rodaron
perlas en llanto de amor.

Leonor Rodríguez Rguez.


LO QUE SE FUE

Lo que se fue se olvida para siempre,
lo que sigue es vivir en el recuerdo,
no se puede controlar la mente,
el amor es un paso en un acuerdo.

Noches se pierden en las sombras,
momentos que retornan constantes
palabras que sonaron en los cielos
y al fin solos los mundos de amantes.

Nostalgias que resurgen en las playas,
mientras juegan las olas con arena,
pensamientos que van a las montañas
mientras queda soledad, dolor y pena.

Si el mañana de amor, trajera nueva vida,
y empezara a resurgir muy fuerte el alma,
esas sombras que persiguen cada noche
quedarian en la luz con plena calma.

Lo que se fuè, no regresa si ha perdido,
lo que llena la existencia y la culmina,
lo que muere , muriò, no hay mas allà
la vida que se va,acabò y ahì termina.

JESUS ALBO


AQUÉL


El recuerdo, la nostalgia, en el tiempo adecuado,
nos permite revivir en minutos, toda la historia del pasado.

Cuando en el corazón quedó engarzado el rubí del amor
de aquél, desconocido,que a tu alma con sublimación enamoró,
en un momento dado en noche de anhelos, a la luz de la Luna,
te sientes transportada, misteriosamente, a la quinta esencia,
que aún sin materia, lo sientes, lo ves y lo tocas.

Gratificante, satisfactoria presencia anhelada y recordado vivir,
tiempos de la vida en que el Sol lucía en la casa,
él fue el lucero deseado que cumplía los requisitos
como cumple el rosal en dar rosas, el río agua..........
él fue la esencia, no la quinta, la que respiraba y suspiraba,
la que mi cuerpo y alma recibía con sumo placer
cuando en mis ojos se miraba, mi boca apagaba su sed,
en mi barca se solazaba, los ardores apagaba en mi flama
avivada con palabras de amor y caricias de pasión.

Se muere la materia, la esencia queda viva en el éter,
hay que saber recogerla para vivirla y amarla..

Leonor Rodríguez Rguez.


JARDIN FLORIDO

Necesito caminar contigo en ese espacio,
donde acomodamos la vida en los paseos,
còmo tan despacio crecen los deseos
y la ilusiòn que sigue va muy despacio,

Cuantas ansias despiertan al quererte
que las razones divagan en la mente,
es un sueño repetido el poseerte
que estoy enloqueciendo cual demente.

Pero voy a seguir..nada que contenga
el deseo terrible que me acosa,
no habrè de descanzar hasta que tenga.

La dicha de que vuele mariposa
en el jardìn florido y no detenga
el deseo de tomar lo sublime de la rosa.

JESUS ALBO.


A MI VERA

Ven a mi vera y te enseñaré
como recorrer los caminos del amor,
sin prisa, con sosiego,
sin atizar la llama del deseo.

Caminos mullidos, césped virgen,
que flote en el ambiente la mirada
leyendo mutuamente en nuestros ojos,
que digan todo, calle la palabra.

Los jardines florecidos son hermosos
cuando en primavera la lluvia los remoja
y el aroma de la tierra nos sumerge
en la vida repetitiva que eclosiona.

Así el amor surgirá en remanso de río bravo
como el jardín que eclosiona a la vida
después de tiempo ser regado.

Leonor Rodríguez Rguez