Cantaclaro, Jefe Cejas, Leo

Y... TE RESPONDO
"Cuando salí de tus carnes
me di cuenta de ese detalle
alumbrado por un aura celeste"
Poeta Lejano
Y...
en esos días todo era luz
dentro y fuera de mi carne convivías
excitado celo-flama refulgente.
Y...
brillaban en tonos de rojo y oro
mis deseos cuando los atizabas
gestando soles vivos e impetuosos.
Y...
sometida, dulcemente te pedía
la dicha de mil veces nuevos génesis
en espacios siderales conquistados.
Y...
allí incubamos lo que sería el mañana
ese hoy que nos supera
un futuro que incierto coquetea.
Locos perdidos buscando esa estrella
donde está el mágico hospedaje
que arrope por siempre
planes nacidos en ese prodigioso Ayer
Ana Lucía
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no quiero tus promesas de papel, quiero tus besos de pasión
antes de tus dulces remembranzas, me inclino por tu cuerpo de tentación
deja que siga el camino, abrázate a mi lado y siente
no volvamos al recuerdo, que nos quita el momento de entrega hoy
no hay plan alguno que sustituya el encuentro con tu espalda
tus caderas y su ritmo, como bambú de ofrenda cierta
no despojes al misterio de lo que deba venir
recibe lo que te ofrezco, mañana, no estare aqui

Besos Señora amada

JC

Querido Felipe,

¡Tienes lo que pidas...!

La materia en pleno roce
es energía transmutada
pura, eterna, conjugada...!

Quieres y concedo.

Si a mi vienes
me tendrás
como la noche al día
y el grácil vaiven del bambú
lo encontrarás al fundirte
en mi pecho y mi vientre.

Cuatro puntos cardinales
de mi cuerpo esperan.

Mi razón se irá de viaje
cuando aparezcas
y...
¡tan solo me mires...!

Solo espero y tu,
solo deséame,
Seré el resto de tus mañanas.
Besos
Ana Lucía


¿Jesús!. Qué vehemencia, que coqueteo, que ternura
fuego por todas partes.
¡Ausilio!
¡ Llamar a los bomberóooooos!
¡Que se quema el montéeeeee!
No puedo salir de entre los rastrojos
de estos versos que me tienen atrapada
agua, por favor agua
no aguanto tanto calor y arrogancia.
Esta parejita
me ha puesto frita con tanto amor y mentira.
?Sera mentira?ó ¿ será en serio?
con la duda me quedo.

Para Ana Lucía y jefe Cejas.
Abrazos, Leonor.


Leonor, para no quemarse es conveniente no soñar

Que habra de cierto entre verdades mentirosas?
con mezcla a fuego lento con mentiras verdaderas
si a fin de cuenta lo que importa son las rosas
que salen de mis ojos al vaivén de sus caderas

un abrazo

Jefe Cejas




Mi Señora

Agua pura y cristalina por tus muslos se desliza
se colocan los instintos en el punto mas certero
y en el monte se ha perdido mi razón y mi camisa
que con uñas y con dientes arrancaste en desespero
Yo no tomo lo que ofreces, arrebato con vehemencia
yo no quiero, yo deseo y por deseo lo consigo
ya no espero de tus ojos la mirada de impaciencia
solo quiero despertar por la mañana contigo
agua pura y cristalina por tus muslos se evapora
al calor de nuestro encuentro, llama viva y combustible
soy Señor entre tus labios y te adoro mi Señora
no es verdad ni es mentira, es posible lo imposible

Besos a usted siempre

Jefe Cejas



¿Te parece poco sueño el que habeis dejado en el versar?
Amigo, no te entiendo
cuando tu par de luceros en vez de chispas
al son de sus caderas
sueltan rosas cual rosal.
Leonor.


Eres delicioso,
viento vehemente...!

Las columnas de mis piernas
sostienen furores contenidos.
Ánfora rebosada
dejar fluir mil ardores.
tus dedos peinan suavemente
sobre mi piel versos de Luna
y de mi flor abierta brota
una hambruna contenida.
Yo te quiero
y mi mirada/fuego
te muestra lascivo lecho
hecho de albahaca fresca.
Mi boca conjura al Mago
y,
en tus brazos, mi Señor,
soy poético orgasmo.

Besos mi querido Felipe...
eterno viajero de tierras,
poemas y cuerpos...!

Ana Lucía
Leito,

¿Bomberos para apagar el monte... de Venus?

Nadie podrá apagar la vehemencia de un verso que arde eterno. El que
vibre poesía siempre será misma flama.

Querida amiga, gracias por tan efusivo comentario...¡Muy bello!

Besitos,

Ana Lucía

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Leo

Mis ojos sueltan rosas y de mis brazos descienden serpientes dispuestas a pecar y hacer pecado
he tratado de contener los hambrientos llamados de mis manos, pero como iman sus caderas me reclaman
dime que debo hacer, si por mas que cierro la boca, lenguas de fuego me llaman al mirar su corpiño?
dime como es que apago el manantial de lava hirviente que por mi dueña amenaza con incendiarlo todo?
son sus brazos mi destierro y es su pecho mi santuario. que he de hacer pregunto para no adorarla?
de las puntas de mis dedos nacen espinas que se clavan en mis propias manos cuando no la alcanzo

que es lo que debo hacer?

Un abrazo

Felipe


Casi
sediento he llegado
a tus sabanas de encaje
a tu serena utopía de pasión
viajero si, desterrado por misterios
develando secretos y rompiendo puertas
descifrando enigmas que me lleven a tu alcoba
en donde se que me esperas, dispuesta y despierta
en donde apenas con una sonrisa convocas atardeceres
obscuridades y rinconces en donde mi barca pueda anclar
Mujer entre mujeres, que conoce las respuestas y no hace preguntas
señora de los versos, de las caricias, de los eternos suspiros convocados
sabor a sandía y a cerezas, amalgama de placeres, conjunción de dos en uno

besos Ana Lucia

Felipe




Mi niña
estas tan azorada con ese amor tan "discreto"
que no te has dado cuenta
del monte que yo me refiero
de Venus sí,pero del firmamento.
Para apagar ese monte,
nombre de diosa del amor,
hacen falta muchos dioses
con las mangueras dispuestas
en tan ardua labor.
¿Bomberos? sí, bomberos del cielo
digo yo.
Besitos, Analú
Leonor

Niño Felipe
Tú me pides ayuda en este amor que brota
por todos los poros de tu cuerpo incandescente?
Yo solo soy Celestina
llevo y traigo mensajitos
de ti a ella
de ella a ti.
No obstante te digo
con mucho secreto:
sigue cadenciosamente
como hasta ahora lo estas haciendo
La Señora de los versos
que te compromete
se le arrebolan las mejillas
como fruta madura para recoger del frutal.
Sus ojos relucen
revolotean en sus cuencas
como pajarillos en el nido
esperando el rico bocado de sus papás.
Esto es lo que yo veo
cuando a ella me dirijo y de muy cerca la miro
ansiosa está de la entrega
que le hago de tus escritos y buena propina me da.
Sigue mi niño, que a la señora tienes
enamorá.
Saludos, Felipe
Leonor.

Mas que Celestina, Paloma agorera
mensajera de sueños envueltos en finas alas
testiga de auroras y de atardeceres amorosos
como lo son las paredes de la alcoba de mi amada
que si expresar palabras pudiesen
coloradas se pondrían ante tanto alarde de pasiones

Mas que Celestina Paloma agorera
trayendo en tus mensajes aliento a esta febril espera
mirando casi de soslayo, los atardeceres
tu que escuchas, tu que sabes, dile a ella mi pesar
mi pesar de no tenerla aunque la tengo
mi pesar de extrañarla en su presencia
mi pesar de no morir entre sus brazos

gracias Leito, besos para ti Paloma agorera

Felipe



Estimulas mágica lira y con tu lejanía inflamas suplicios que me desgarran.
Me sostiene la fragancia de un jardín y asomada a la ventana te espero.
Mi señor eres hálito, celo, idea, fuego, pensamiento y cuerpo míos.
Con discretos símbolos mágicos y palabras provocadoras
armo una atractiva letanía que doblegue tiempo erguido
que traiga las crónicas de aquellos mundos visitados.
Mar, espero tu ancla mientras se mece mi barca
estoy develando excitadas entrañas del tiempo ,
cordura viajera como mi hombre, vaga,
libertaria poseida, esperándote.
velo, amo, soy centinela
de sed por ti muero
mi señor,

besos querido Felipe,




Felipe, me vas matando con ese versar... que si sigo este juego hasta
las últimas concecuencias...¡Me lo creo!

Tu pesar es mi pesar, me besas con mirarme, con solo beso derrumbas el
sigilo.

¡Hablas muy bello mi hombre!

Besitos,

Ana Lucía



¡Mi querido Felipe!

A borbotones una copa se desborda
y su peana espera la mano que ase su cintura,
lava/manantial mi celo arde y recorre mis valles.
No cantes alto, que con un susurro a mi oido
se abre mi flor para recibir tu rocío estimulante.
Sigue tu canto, sigue en tonos de rojo,
sigue que en el archivo del tiempo
hay unos picos como senos de vestal
de cuyos pezones erectos manan recuerdos
de equilbradas batallas
sin vencedores ni vencidos...
Solo la noche, una ventana abierta
y el vaiven risueño de una cortina de encaje
y allá, en el espacioso Universo
dos cuerpos mágicos entrelazados, tuyo y mío.

Besitos,

Ana Lucía




Mi querido niño, Señor:
En mis vuelos por el universo
he recogido esparcidos
los versos que lanzaste al viento
por tu exacerbada alegría
al conseguir que la Señora
te recibiera en su alcoba.
Los he reunido todos,
junto con los de ella
los guardo bajo siete llaves
en cofre de corazones sedientos
de amores, suspiros, placeres.........
hambrientos de sabiduría
de palabras enriquecidas
en expresar sus sentires.
Los guardo, bien guardados
para que estos corazones
aprendan de vuestros versos
salgan al mundo ilustrados
enseñen a sus hermanos.


Corazones desterrados
separados por regiones de universos
con las rimas de sus prosas
mantienen tácitos anhelos
de encontrarse algún día
y expresar sus sentimientos.

Abrazos y besitos, Felipe, Ana Lucía.
Leonor.